Los mundos astronave flotan completamente aislados en la inmensidad del espacio como si fueran joyas dispersas sobre un paño de terciopelo interminable. Ninguna estrella ilumina sus esbeltas torres y, al estar alejados del calor de cualquier sol o planeta, lo unico que contemplan sus cupulas es la negrura del vacio espacial. Unas luces internas brillan como fosforos a traves de mamparos semitransparentes y en su interior habitan los supervivientes de una civilizacion que abandonaron hace eones en medio de una destruccion aterradora. Son los Eldars, una raza practicamente extinguida que no es mas que el ultimo vestigio de un pueblo que antaño podia destruir planetas y apagar soles enteros solo con sus sueños.
La Raza Eldar
Los Eldars tienen una larga y complicada historia de viajes espaciales. Tan extensa es, que se sabe muy poco sobre su evolucion fisica primitiva y de su existencia como habitantes de planetas. Sus mundos de origen fueron destruidos durante la catastrofica desgracia de la civilizacion eldar conocida como la Caida. Los miembros de este pueblo que lograron sobrevivir a tiempos tan aciagos huyendo en enormes naves espaciales denominadas mundos astronave conservan ecos de la historia de su raza en forma de historias tradicionales, canciones y bailes. Los mundos astronave contienen los ultimos restos de la impresionante arquitectura y las legendarias obras de arte caracteristicas del imperio eldar.
Los Eldars son extremadamente ancianos en comparacion con los humanos, pues suelen vivir mas de mil años antes de que la vejez los alcance. Ademas, viven a un ritmo mucho mas intenso que el del mas excepcional de los humanos. El corazon de los Eldars bate casi el doble de rapido que el de un humano, su mente procesa ideas y emociones a una velocidad asombrosa y sus reacciones fisicas son casi demasiado rapidas para que el ojo humano pueda seguirlas.
A primera vista, los Eldars son fisicamente parecidos a los humanos, pero con una mirada mas atenta pueden observarse varias diferencias. Tienen las extremidades mas largas, rasgos faciales elegantes y ojos desviados de mirada penetrante. Tienen las orejas puntiagudas y una piel delicada de alabastro sin imperfecciones. Sin embargo, la diferencia mas fundamental puede observarse en el movimiento de los Eldars, pues irradian una elegancia inhumana que se hace patente en la sinuosa agilidad con la que luchan y en la destreza con la que blanden sus armas.
Por otro lado, todos los Eldars son capaces de manipular hasta cierto punto las energias mentales. Su avanzada tecnologia se basa en la ingenieria psicotrópica, la manipulacion de la materia mediante la energia psíquica. No obstante, este poder mental tiene una desventaja y es que la mente de los Eldars es mucho mas propensa a los extremos que la de un humano. Los Eldars sienten todas las experiencias de la vida a un nivel realzado, ya sea la satisfaccion intelectual del estudio, el regocijo de la batalla o cualquier placer o sensacion imaginable. Sin embargo, este potencial para el gozo va acompañado de una capacidad igualmente elevada de sentir la desesperacion, la rabia e incluso el odio.
Ningun ser vivo, ni siquiera los Eldars, es capaz de saborear frutos tan jugosos de un modo tan descontrolado o indisciplinado sin sufrir sus consecuencias. Por consiguiente, si un Eldar se entregara por completo a sus deseos, acabaria siendo destruido. Este fue precisamente el destino de los antiguos Eldars, cuyas perversiones comportaron el nacimiento de un dios vicioso y torpe, y con ello la Caida de la raza eldar en sí.