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Sacado del codex Imperio Tau.

 

 

Se dice que Aun´Va es el más viejo y el más sabio de entre los integrantes de su casta. Lleva aconsejando a los más importantes líderes de los Tau desde mucho antes de lo que nadie es capaz de recordar y su modo de actuar está presente en muchos pasajes de la historia tau. Es el etéreo con mayor rango que hay en T´au y tiene un lugar en todos los concilios que se celebran no solo para decidir cómo se gobierna dicho planeta, sino el imperio entero. Sus palabras son acatadas por todos los miembros de su casta, ya que sus consejos siempre han sido sabios y acertados.

Pero Aun´Va no es solo un líder espiritual, pues la historia de los Tau está repleta de momentos en los que él mismo ha dirigido la expansión de esta raza (algo que hizo desde que empezó la conquista). Su presencia dio a la Casta del Fuego la fuerza y la rabia justiciera que necesitaba para acabar con los odiosos Reek del sistema Si´coa y sentenció el ¡Waaagh! Grognik en las faldas del Monte Scion (sentencia que ejecutaron a la perfección diez millares de guerreros del fuego).

A continuación, Aun´Va declaró la Tercera Expansión, tras convencer de ello a los consejos combinados de las cuatro castas. Flanqueado por su guardia ceremonial, Aun´Va dio un discurso lento y deliberado que culminó en una enfervorecida llamada a las armas. Mientras sus palabras aún resonaban en el silencio, un millón de guerreros del fuego que escuchaban fuera de la cúpula del consejo cayeron de rodillas, rendidos a su voluntad; la Casta de la Tierra empezó a erigir un espléndido templo en su honor; la Casta del Aire construyó un millar de navíos estelares, cada uno de ellos llamado como alguna de las hazañas del etéreo; y la Casta del Agua dedicó un ejército de diplomáticos a llevar su palabra por las estrellas.

El siguiente acto de Aun´Va consistió en desprestigiar las acciones del Comandante O´Shovah y proclamar a O´Shaserra nueva heroína del imperio. Ella sería quien dirigiese la Cruzada de la Tercera Esfera, mientras que el maestro la guiaría a ella y a sus poderosos ejércitos por el Bien Supremo. Mientras O´Shaserra dirigiese el ataque, Aun´Va podría estar presente allí donde fuera más necesario. La cruzada sufrió grandes pérdidas a manos de los Orkos en los Campos de Celephel, pero las palabras que Aun´Va transmitió personalmente a cada uno de los soldados hicieron que estos recuperasen su valor y pudiesen aguantar ante un ejército mucho más numeroso que el suyo. En lo más profundo del bosque quemado de Il´Wolaho, Aun´Va consoló a O´Shaserra con sus sabias palabras y la ayudó a enfrentarse a sus miedos y a soportar la pérdida de sus hermanas para beneficio de todos. Él guardó los Ta´lissera de sus hermanas cuando estas faltaron y dejó sin pronunciar las últimas palabras de la ceremonia hasta que las hermanas velvan a reunirse.

Aun´Va es el etéreo supremo de todos los planetas conquistados durante la Tercera Expansión y O´Shaserra permanece leal a su lado. Media docena de nuevos planetas, un millón de guerreros del fuego y muchos colonos más están preparados para sacrificarlo todo en cuanto su querido etéreo, el Maestro del Espiritu Eterno, Aun´o´T´au´Acaya´Va´Denta, se lo proponga.