Evidentemente, esta web utiliza cookies, estrictamente necesarias para su funcionamiento; no para fines publicitarios. Las cookies empleadas por terceros son ajenas a nosotros.





Las primeras Hijas del Emperador eran tan solo una comunidad de guerreras que se entrenaban en una amplia gama de disciplinas a través de las cuales creían que podían servir mejor al Dios Emperador de la Humanidad. Estas disciplinas iban desde el estudio escolástico y el debate filosófico a los cuidados médicos. Muchas de estas tradiciones de las Adepta Sonoritas perduraron de una forma u otra hasta la era posterior a la Apostasía.

Las practicantes de cada disciplina se organizan en una de las tres órdenes mayores (y otras muchas más pequeñas) que se dedican completamente a su propia esfera de influencia. Las integrantes de estas órdenes suelen convertirse en consejeras de autoridades de la Ecelsiarquía y el Adeptus Terra y también acompañan a inquisidores del ordo Hereticus, ya que poseen conocimientos especializados e inestimables. Algunas órdenes, como las dialogantes y las famulatas, cuentan con el mismo número de hermanas que las órdenes militantes, mientras que otras solo disponen de un número reducido, ya que su especialización es muy rara. Los claustros de los conventos Prioris y Sanctorum son enormes y tortuosos y aquellos que l9os han visto no sabrían adivinar la extensión total de las hermanas que trabajan en el interior de las cámaras lúgubres.

-Las Órdenes Dialogantes


Las hermanas de las órdenes dialogantes son eruditas y consejeras, expertas en la traducción de textos tanto humanos como alienígenas, sagrados y blasfemos. Sus servicios son solicitados con frecuencia por la Inquisición, puesto que sus habilidades les sirven para desentrañar los códigos más enrevesados y para revelar las referencias más ocultas con las que poder llevar ante la justicia a un traidor.

Se dice que las hermanas de más antigüedad de las órdenes dialogantes mantienen los textos ancestrales en la biblioteca oscura y polvorienta de la Cámara de los Orígenes, enclavada bajo el palacio del Eclesiarca en Terra. Solo las autoridades más altas de la Eclesiarquía tienen acceso a estos archivos sagrad0s, pues se rumorea que allí se guardan bajo llave los secretos de la Era de la Apostasía y del reinado de Vandire.


-Las Órdenes Famulatas

Las órdenes famulatas forman un entramado de chambelanes, consejeras y diplomáticas cuyo cometido es garantizar que las familias nobles del Impero colaboren en el bien de la Humanidad negociando tratados comerciales, alianzas y bodas entre familias. Las hermanas de las órdenes famulatas simpatizan con las creencias de los inquisidores de la facción troyana, que afirman que el Emperador funciona a través de sus sujetos, lo que explica los milagros realizados por muchos santos antiguos en el Imperio. Como las órdenes famulatas tienen acceso a las grabaciones genealógicas de millones de habitantes imperiales, no sorprende que estén presentes antes, durante y después de que se registre una manifestación de la Gracia del Emperador y que, en ocasiones, parezca que pueden predecir cuándo van a tener lugar dichas manifestaciones.

-Las Órdenes Hospitalarias

Las órdenes hospitalarias proporcionan cirujanas, médicas y enfermeras a todas las divisiones del ejército imperial (a excepción del Adeptus Astartes) y llevan a cabo actos de gran compasión en la ejecución de sus deberes. Los soldados a los que atienden suelen considerarlas como santas y muchas de ellas han sido beatificadas (la mayoría de las veces póstumamente) después de haber realizado alguna hazaña personal de gran valentía frente al enemigo. Las integrantes de las órdenes hospitalarias suelen acompañar a muchas divisiones militares del Imperio, desde regimientos de la Guardia Imperial a ejércitos personales de comerciantes independientes, y son famosas en todo el Imperio por sus habilidades. También se sabe que están vinculadas a las órdenes famulatas porque sus habilidades complementan a las de las hermanas de esta orden en la búsqueda de los detalles genealógicos y los linajes.

-Las Órdenes Sabinas

Los habitantes del Imperio desconocen a las órdenes sabinas, ya que estas ejercen sus funciones en las fronteras del espacio humano y quizá regresan a Terra o a Ophelia VII una sola vez en su vida. Las órdenes sabinas acompañan a los Misssionarius galaxia en misiones a planetas recién descubiertos, pues están especializadas en infiltrarse en estos mundos primitivos y atrasados que se oponen a la llegada del Imperio. Las hermanas sabinas se establecen como profetisas del Emperador y predican el Culto Imperial en secreto o fomentando revueltas contra los líderes religiosos de esos planteas. Cuando el missionarius Galaxia llega y anuncia su presencia a los habitantes de estos planetas, las hermanas sabinas ya han profetizado tal aparición y lideran a los nativos simpatizantes con el Credo Imperial en revueltas con consecuencias fatales contra sus líderes. Debido a su misión, las hermanas sabinas están alejadas del Imperio durante muchos años y muchas hermanas adoptan la apariencia, vestimenta, lengua y cultura de los mundos en los que se han infiltrado. Solo cuando su verdadero propósito queda al descubierto se desprenden de su disfraz y vuelven a ser siervas piadosas del Emperador.

-Las Órdenes Pronatus

Las órdenes pronatus están especializadas en la recuperación, protección, estudio y reparación de artefactos valiosos para la Eclesiarquía. Entre estos artefactos se encuentran las miles de reliquias sagradas veneradas por los habitantes del Imperio, pero también objetos capturados por las fuerzas imperiales considerados demasiado potentes o importantes como para que caigan en manos enemigas. También tienen la responsabilidad de mantener y bendecir los estandartes y símbolos de las órdenes militantes. Incluso se las requiere para volver a consagrar las libreas de otros cuerpos imperiales. Es el caso del estandarte del capítulo de los Lamentadores del Adeptus Astartes que las hermanas repararon tras su participación en la sublevación Badab. Las historias cuentan que las hermanas pronatus que repararon el estandarte lloraron sobre él al contemplar los pecados de los Lamentadores. En la actualidad, el estandarte se denomina el Estandarte de las Lágrimas. Algunas órdenes pronatus han defendido con sus vidas los artefactos que guardaban o estudiaban y el destino de la Orden de la Bendita Pregunta es una lección saludable de los riesgos inherentes a la acumulación de objetos imbuidos con la malignidad de los Poderes Ruinosos, incluso aunque el fin sea salvaguardar a la humanidad de su influencia.