Sacado del codex Cazadores de Demonios.

 

 

"No existe nada en el arcano y blasfemo arsenal del Caos que se pueda comparar a la fe. Con el poder de la fe, nuestras armas se convierten en brillantes y cantarines instrumentos de castigo que sajan a los demonios con facilidad. Con el poder de la fe, nuestras mentes se tornan berbiquíes de pureza que taladran al demonio con facilidad. Con el poder de la fe, nuestras palabras se convierten en sonidos que los demonios no pueden soportar escuchar y que los devuelven al Inmaterium con facilidad. Podría enfrentarme a mis enemigos sin armas y sin temor a perder la vida, pues sé que el Emperador cuida de mí, dirige mi mano y no dejará que nada me suceda. Déjales entrar. Les demostraremos el poder de la fe".

Hermano Capitán Stern de los Caballeros Grises.

El Hermano Capitán Stern es un miembro muy respetado y condecorado dentro de su compañía y ha llevado a buen puerto numerosas campañas contra el Caos. Su destino se vio ligado al del gran demonio de Tzeentch, M'kachen, cuando la perniciosa influencia de este en el Culto de la Garra Roja fue detectada por el Ordo Malleus. Stern llevó a cabo un ritual de desvanecimiento y condenó al demonio a cien años y un día de reclusión en la disformidad. El carácter vengativo del demonio es tan grande que ha jurado encontrar a Stern y devorar su alma. Stern, que está cerca de cumplir cuatrocientos años al servicio del Emperador, se ha cruzado en el camino de este demonio en varias ocasiones durante este tiempo y, cada vez, su absoluta fe en el Emperador le ha salvado de la eternidad de torturas que M'kachen ha preparado para él. No obstante, las maquinaciones de Tzeentch son infinitas. Sería una gran pérdida para el Ordo Malleus que el Hermano Capitán Stern cayese a manos de esta entidad diabólica y que su formidable potencial se perdiese.