La revelacion de Ghedeon

El devenir del Universo es misterioso, hay situaciones que han de darse otras que no se daran nunca y algunas que sólo dejan preguntas en el aire ¿Que opinais de esta?

[i:3a7rex4u]El “Asesino de la esperanza” mantenía una posición estacionaria alrededor de la dañada nave imperial, la persecución había sido larga pero tras un corto intercambio de disparos las lanzas de energía de la barcaza caótica habían conseguido dañar los motores del transporte que ahora, inerme, se encontraba a merced de las armas de la nave caótica.
En los muelles los grupos de asalto se encaminaban hacia las capsulas de abordaje dispuestos a conseguir todos los materiales que los perros falderos del cadáver imperial trasportaban en la dañada nave.
Gedheon era uno de los designados para el asalto y con su grupo de Hijos del Emperador se situaba en el interior de las pesadas capsulas de asalto. El bólter de asalto y la espada sierra que cargaba en sus manos habían participado junto a él en cientos de asaltos como aquel y sin duda eran las mejores armas para luchar en aquellas condiciones. Se coloco los cinturones de seguridad y, junto a sus compañeros, aulló de placer cuando el proyectil inicio su corto viaje hacia la nave imperial y lo que era mejor hacia una nueva orgía de sangre y lamentos a mayor gloria de Slaanesh. El impacto fue tremendo y tras un leve instante con un chillido lastimero la trampilla de la capsula se abrió y con un rugido los asaltantes irrumpieron en el interior de su presa para cobrar su recompensa.
Mientras destripaba a un asistente de la nave que intentaba atacarle con un garfio de energía Gedheon pensaba que las cosas no estaban desarrollándose como deberían; la resistencia a bordo era muy intensa por lo que el asalto no progresaba como normalmente pasaba en una simple nave de transporte y además se habían encontrando con soldados de la Guardia Imperial que estaban haciendo pagar con sangre cada pasillo, estancia o muelle de la nave que ocupaban y eso no era lo más extraño pues no era una unidad al uso si no que entre otros se incluían tropas de Mordia, Cadia, Catachán y Armageddon que luchaban como fieras atrapadas. En la cubierta tres la cabeza del hermano Eristes había estallado en mil pedazos cuando un miserable guardia le había disparado a bocajarro con un fusil de plasma y en la sala de reparaciones que habían dejado atrás al hermano Bartas un mecánico de la nave le había cortado el cuello con un soldador láser. No definitivamente las cosas no marchaban como deberían.
La lucha continuo durante horas y poco a poco las fuerzas asaltantes fueron controlando todos los niveles de la nave hasta que solo quedo un aislado núcleo de resistencia en la zona de las estancias de los tripulantes que habían colocado una barricada en la entrada. Los supervivientes del asalto se agolpaban en los accesos a la zona mientras se preparaban para la acometida final, Gedheon introdujo un nuevo cargador en su bólter y se unió al grupo que asaltaría las estancias en primer lugar. Tras lanzar varias granadas de humo los marines renegados se lanzaron locos de furia contra los últimos defensores que, a ciegas, disparaban sus armas confiando en que el angosto pasillo por el que avanzaban y que obligaba a los asaltantes a ir apelotonados ayudaría a que sus disparos impactaran en el mayor grupo posible de tropas enemigas. Aunque alguno de los asaltantes cayó en la furiosa carrera el grupo llego a la zona de la barricada y tras desmantelarla se enzarzaron en un duro cuerpo a cuerpo con los imperiales que la defendían. Gedheon se vio apartado de la lucha principal cuando una granada estalló tras él y lo envió rebotando por las paredes hasta acabar destrozando con su pesada armadura la entrada de una de las estancias. Cuando recobró el equilibrio, parpadeo varias veces dentro de su casco para asimilar lo que estaba viendo: en el jergón de la habitación un niño que no debía llegar al año estaba sentado de espaldas a la mole acorazada y a través de un espejo le miraba con cara de tristeza. El marine no podía apartar la mirada de aquellos ojos que veía reflejados en el espejo su primera intención había sido levantar su espada y cortar a la criatura por la mitad pero al levantar su mano comprobó que la había dejado caer y lo mismo ocurrió cuando intento disparar su bólter contra aquel niño. Gedheon dio un paso para acercarse hacia la cama, pero comprobó que estaba inmovilizado de cabeza para abajo, miro hacia abajo para comprobar que nada lo estuviera sujetando y al alzar la vista una oleada de pánico recorrió todo su cuerpo pues tras el niño de la cama, reflejado en el espejo no se veía al Gedheon que había asaltado la nave con su armadura de vivos colores con lo símbolos de su señor… no, la figura que el espejo le devolvía era la del Gedheon que fue, con su armadura morada y el águila imperial engastada en su pectoral refulgiendo en tonos dorados. ¿Qué estaba pasando? ¿Qué era aquello? Y de repente como un rió impetuoso que destroza todo a su paso un reconocimiento de fuego y hielo rasgo la mente del marine, la muerte, la violencia y el dolor que había causado rasgaron su alma negra y en aquel momento la parálisis que le dominaba desapareció y una luz tan cegadora como la de mil soles seco los ojos de Gedheon…
La escena con la que se encontraron los miembros del equipo de asalto al entrar en la habitación fue de lo más extraña, en el centro de la estancia Gedheon hincado de rodillas con las palmas de la mano en el suelo y repitiendo entre dientes como en una plegaria una sola palabra: Perdóname, perdóname, perdóname…[/i:3a7rex4u]

Envio editado por: Reverendo, el: 2008/08/26 20:33

Jope, hoy ya he puesto un Karma así que no puedo ponerte a tí, pero recuérdamelo mañana.

Muy bueno, me intriga el niño que posiblemente sea un psico muy potente, pero que hace un psico asi en un trasnporte imperial y o en una nave negra..., y me intriga el variopinto grupo de guardias, proque habra tantos regimientos mezclados.

Muy buen relato.

Karma para tí machote, un texto muy significativo, me a gustado mucho...
Se nota que eres papa, eh?


Ahora a ver que opinan los colegas caóticos.


Saludos y el Emperador protege!

Muy bueno, curioso, nunca hubiera pensado en un Hijo del Emperador pidiendo perdón, pero realmente es bueno.

No es tan raro Cornelius. Horus, Luther y toda esta peña se arrepentían de todo cuando el Caos les abandonaba, hasta pedían la muerte como castigo. En "Galaxia en Llamas" vemos ***MINISPOILER*** que el "Pequeño Horus" Aximand seguirá el mismo camino.

Por cierto Rev, ya tienes el Karma que te prometí.